Cuando abrace a un niño, cuando me diga que me odia, entre lágrimas, por el sólo hecho de pertenecer a su historia, a su itinerario; cuando me vea y descubra esa homología de intereses, de bagaje neuronal, y me mire con distancia; cuando un niño me plantee la duda metafísica más radical para una voluntad límite, a saber, esa duda que busca en la base del recuerdo sea cual sea la vía más corta y efectiva para escapar de la conciencia, de la vigilancia, del castigo; cuando me vuele tres cuartos de la cara con su ignorancia más propia, cuando me ignore, cuando no entienda lo que le digo y ría
En el momento de abrazar a un niño triste
de llamarlo por mi nombre
de dejarme asesinar en el patio de su casa
entonces
y sólo entonces
habremos dicho algo relevante sobre el mediodía
sin traicionar su inocencia o su luminosidad
sin contradecir aquello que en nosotros habla aunque no seamos capaces de leer ese discurso en voz alta
martes, junio 17, 2008
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5 comentarios:
mi hermano chico el ocho de junio, como un cuarto pa las doce del día me dijo:
pao, nacer es morir.
"La hipótesis de Dios es una hipótesis peculiar, en tanto que
supone un objeto infinitamente incomprehensible, a pesar de que
cualquier hipótesis como tal supone que su objeto se concibe
verdaderamente en la hipótesis. Esto permite sólo un modo de
entenderse a sí misma la hipótesis; a saber, como vaga pero verdadera en la medida en que es definida, y como tendiendo continuamente a definirse a sí misma más y más e ilimitadamente."
- CHARLES S. PEIRCE
Insisto en indicar la divinidad en el hecho de que los perros tienen pulmones
Hola Max
El problema de la borrachera es que a veces se escucha más de lo que se permite al oido
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