miércoles, mayo 14, 2008
Pasamos del pasado al presente y del presente al futuro a través de puertas muy pequeñas, muy estrechas, todas muchas y muy iguales. Siempre con un peligro como de desierto sobre la cabeza, caluroso en extremo, con aves que giran en el aire. Hay algo o alguien que constantemente nos mira, evaluando cada cuadro, y siempre en silencio: como si callara justamente aquello que buscamos escuchar cuando nos asalta el pánico de ser siempre iguales.
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3 comentarios:
¿el pánico de ser siempre iguales, o el pánico a ser iguales -temor culiao-?
salucita.
De ahí que el Hentai posea algo de terror
cuando nos asalta el pánico-de-ser, en volá lo calla y se caga de risa.
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